Fiscales, mandos policiales y personal con funciones de investigación en actividades delictivas se reunieron en el Centro de Formación de la Cooperación Española para asistir al “Curso de formación para jefes de unidades de prevención e investigación de la delincuencia organizada violenta”, un encuentro organizado por la Secretaría de Estado y Seguridad del Ministerio del Interior de España; la Dirección General de Relaciones Internacionales y Extranjería; y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).
La delincuencia organizada es un común denominador en la región y, por esa razón, promover el intercambio de experiencias en aras de un mayor conocimiento compartido de las principales amenazas para la seguridad y, por tanto, del desarrollo de las sociedades, así como la adopción de medidas adecuadas de respuesta a las amenazas comunes identificadas, es parte de la aplicabilidad de esta temática para la región.
La Secretaría de Estado de Seguridad (SES) del Ministerio del Interior y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) vienen colaborando tradicionalmente con los países iberoamericanos mediante el intercambio de experiencias para lograr un mayor conocimiento compartido de las principales amenazas para la seguridad, con base en el fortalecimiento institucional de los servicios públicos responsables de proporcionar seguridad a sus sociedades.
“Esta es una excelente oportunidad para intercambiar conocimientos y formas de trabajo entre la policía de América Latina y mejorar en la lucha contra el crimen organizado. Me llevo muchas enseñanzas que bien podré aplicar en el Perú para el trabajo que venimos adelantando”, manifestó Jean Paul Bergerot Castro, oficial de la policía del Perú.
Los países iberoamericanos y España han sufrido las consecuencias de la actuación de los grupos delictivos, cuya estrategia se basa en el empleo de la violencia, a veces extrema, e incluso del terrorismo. Es por eso que esta actividad se constituye en un mecanismo útil para el fortalecimiento de la respuesta institucional a través de la capacitación de los servidores públicos a los que les ha sido encomendada.